Defensores de Belgrano derrotó por 1 a 0 a Chacarita Juniors, en disputa de la fecha número 4 de la zona B de la Primera Nacional, extendiendo la paternidad reinante en la era moderna (de los años ‘90 para aquí) con el funebrero. Una vez más debemos hablar de muchos puntos altos, bandera y goleador Aguirre, aduana y habilitación deliciosa Benítez, chaleco antibalas y garantía suprema Medina. Los comandados por Carlos Mayor salieron a comerse a su rival desde el minuto cero, crearon muchísimas chances de gol y golpearon en el momento justo, supieron defender la ventaja y la hinchada cantó todo el partido.Crónica dedicada a Marquitos Zuker, hincha de Defensores y militante político desaparecido y asesinado por la última dictadura cívico militar, en el aniversario número 45 de sus desaparición forzada.
“Llueve sobre mojado o si volvieran los Dragones”
En un terreno de juego que permitió jugar al futbol pese a que llovió a cántaros todo el fin de semana, incluidos los 90 minutos, el Dragón expuso todo su repertorio de movida y fue así que al minuto uno y al minuto dos logró llegar con peligro al arco tricolor. La primera fue una combinación de muchos pases a un toque de punta a punta, y el centro por abajo que no llegó a destino por muy poco. Era el gol de la fecha Carlitos.
La zona predilecta de ataque en la primera etapa fue la banda izquierda, ocupada y dominada en este caso por Patricio Moyano y Fernando Rodríguez, ambos jugando en estas pocas fechas que corren del torneo en un gran nivel. Combinaciones de primera sobre la línea, malabarismo, eficacia, algún lujo, mil desbordes.
“Todavía estoy aquí”
Luego de un arranque con dos igualdades y mostrando poco del juego que lo caracterizó y lo llevó a pelear el ascenso en las últimas 3 temporadas, el rojinegro se despertó goleando en la Isla Maciel.
Con Benítez como figura absoluta (Agustín llegó a los 100 partidos disputados con la casaca defensorista, y además recibió su merecido aplauso cuando fue sustituido, enmarcando este también la performance en la Isla Maciel) se reencontró su juego y su contundencia.
Una vez dice aquí estoy consiguiendo un triunfo de resonancia por el rival y por la solvencia que demostró el conjunto del Bajo Núñez para alzarse con el botín de los 3 puntos.
“Un mundo mejor”
Pese a las torrenciales lluvias y al clima cada vez más individualista que impera en la sociedad hoy, Defensores busca en el colectivo su identidad, primero el grupo después el equipo. Así es que tanto en la fecha anterior como en la victoria reciente cada jugador corrió por el compañero cuando la situación lo requería.
Confiar en el otro, brindarse al cien, permitir la llegada del amor, seguir y seguir y dejar una huella y una escuela.
Junto a la enfervorizada hinchada, acorralando a su oponente contra las cuerdas de la techada (que estaba colmada) y de avenida del Libertador, el Dragón llegó muchas veces con mucho peligro:. La mayoría jugadas colectivas, algunas incluso despejadas casi en la línea, otras que por milímetros no fueron gol.
“Cuando consigas estar a solas con vos mismo vas a ser El rey de un un reino que recién se levantó”
Sin pensar en los rivales, Defe consigo mismo.
Pero antes del final de la primera etapa, a los 38 minutos llegó el tanto y con el una garúa de justicia. Desde la mitad de cancha el pulpo Benitez habilitó magistralmente, pinchando la pelota por encima de la defensa rival, al capitán del equipo que le ganó a su marca, adelantó la pelota y colocó su remate a un costado a la salida del arquero. Otro día en la oficina del Topo
Golazo y delirio festejado de frente a su gente, con la mano en el corazón, en la tribuna techada que no cesó de alentar los 90 minutos, pero sobre todo cuando más llovía.
“Por aquí anda dios con regadera de lluvia”
En la segunda etapa la visita necesitada salió con mucha enjundia. El diluvio no paraba en ningún momento, favoreciendo a la búsqueda de chaca que iba, pero sin ideas claras. Es por eso que el balurdo climático los favorecía. Ante el descontrol el Dragón no podía hacerse de la pelota y pelotazos desde lejos cruzados se iban sin traer demasiado peligro.
Sin embargo, hubo dos remates entre esos ataques desprolijos del funebrero que trajeron alertas y fueron desbaratados por Alejandro Medina, que ha demostrado en lo que va del torneo estar a la altura en seguridad y confianza.
Más allá de esos minutos de dominio del rival por necesidad y aprovechando el estado del campo del juego (que hay que aclarar que bancó todo el partido permitiendo jugar hasta el final) que se iba poniendo cada vez menos firme, el conjunto comandado por Carlos Mayor no pasó por grandes sobresaltos y tuvo alguna oportunidad para aumentar la ventaja. Sin embargo, la mínima diferencia fue suficiente y ajusticiante para poner cordura en el resultado del partido.
Manteniendo siempre los pies en la tierra este equipo empieza a demostrar que está para grandes cosas, acompañado por supuesto de una dirigencia y de una familia defensorista que siempre está a la altura de las circunstancias, en este caso habiendo pintado en la semana la cancha para crecer todos un poquito más.
Mención especial para Juan De Tomasso quien perdió físicamente a su padre esta semana y el domingo defendió los colores rojos y negros como siempre y mejor que nunca dando una prueba de valentía y carácter. Gracias Juan, te abrazamos.
“Cambiar el mundo amigo Sancho, que no es locura ni utopía si no justicia”
Por: Martín El Lakkis
Fotos: Fausto Gómez / Lucas Kupersmid