El Dragón empató agónicamente por 2 a 2 frente a Chacarita en el Bajo Núñez, fue en disputa de la fecha número 26 de la Primera Nacional, dos veces lo perdían los dirigidos por Carlos Mayor y consiguieron ponerse de pie, faltó puntería una vez más para quedarnos con la victoria pero de todos modos seguimos dentro del G8 con el sueño en la mochila y la fe intacta.
Con un doble cabezazo en el área en el amanecer del partido la visita se ponía sorpresivamente en ventaja. Las cosas no empezaban de la mejor manera pero quedaría todavía mucho de noche por delante, con una tribuna en gran número cantando y alentando durante todo el cotejo.
Tras un buen desborde de Brian Gómez, que jugó por la izquierda abajo,de nuevo, y volvió a jugar un gran partido, respondió Defe, pero la pelota no pudo ser enganchada con precisión por Nadir Zeineddin y no corrió buena fortuna.
Una vez más el número 4 era protagonista, recibía en la puerta del área grande y su remate fue contenido por el nunero uno del Tricolor.
Una vez más, tras una muy buena combinación con Agustín Benítez, quien se destacó en la mitad de la cancha, Gómez definió pero el arquero le tapó en dos ocasiones el grito.
Tras esa llegada vino un centro, el rebote fue rescatado por Claudio Salto y su remate se fue apenas desviado.
El Dragón fue muy superior en el trámite del partido durante el primer tiempo y su rival no contó con otra llegada mas que la del gol.
Se percibía que habría algo más.
En la segunda etapa tras un desborde de Claudio Salto llegaría el cabezazo de Enzo González. El goleador empezó a pagar en goles la confianza depositada en él y le puso justicia al marcador.
Hay que destacar el partidazo que jugó una vez más Ignacio Gutiérrez. El número 5 es el patrón indiscutido de la mitad de cancha y es el jugador más regular del Dragón del Bajo Núñez.
Salto intentaba otra vez de afuera del área pero su remate se volvía a ir desviado.
De contragolpe llegaba para colmo el dos a uno de la visita que era un balde de agua fría, sin embargo la tribuna empezó a saltar y cantar más que nunca.
Hay que hacer un párrafo aparte para Gutiérrez que frenó un ataque adentro del área con maestría.
Al quedar con vida, ya en la agonía del encuentro, tras una tremenda jugada de Gonzalo Aquilino, surgido de la divisiones inferiores, llegó el empate.
También hubo un muy buen regreso a la cancha de Nicolás Borsotti quien es fruto de la cantera. Aplausos para ellos.
El empate no era lo que esperábamos, pero seguimos acomodados y dando pelea en un torneo muy difícil, que va a llegando a su recta final, encontrándonos de pie, mirando el horizonte y con el sueño en el corazón de conseguir el tan ansiado ascenso.
Defe sueña.
Por: Martín El Lakkis
Fotos: Fausto Gómez / Lucas Kupersmid