El Dragón no logró mantener la ventaja obtenida durante el primer tiempo y empató uno a uno frente a Nueva Chicago en el estadio Juan Pasquale, pese a no haberse quedado con la victoria continúa en la zona de reducido, en donde se dirimirá el segundo ascenso que entrega la categoría.
En el primer tiempo todo fue Rojo y Negro, la tenencia de la pelota, los ataques, las recuperaciones, la presión alta, Chicago en ningún momento logró hacer pie ni salir de la telaraña que el Dragón le tejía.
Desde hace varios partidos el faro que tiene arriba el equipo de Pablo Frontini es Iván Sandoval, aguanta todas las pelotas y está cada vez más cómodo con los pies.
Así fue que una buena combinación y un pase de lujo del nueve fueron la antesala de un remate de Olivares que el arquero llegó a tapar cuando buscaba el ángulo derecho.
Promediando la primera etapa otra buena combinación esta vez entre Sánchez y Benítez logró dejar de vuelta a punto caramelo a Olivares para disparar y su remate se fue apenas arriba del travesaño.
De tanto ir el pájaro a la fuente se quebró el resultado, cambio de frente de tiro libre de Maxi Centurión, que estuvo muy firme abajo, Juan Manuel Olivares pasó como una flecha y habilitó a Chávez, que tiró el centro al punto del penal conectado por el Pato Sánchez culminando en la ratonera del arco haciendo delirar a todo el Juan Pasquale.
Tras conseguir el adelantamiento en el resultado los del Bajo Núñez continuaron con la presión alta y asfixiando a su rival que no logró en todo el primer periodo encontrarse en la cancha.
Los mediocampistas del Dragón se divertían y hacían jugar. Tito Chávez tuvo un gran partido, bella combinación entre Olivares y Sánchez que habilitó al número 11, se le fue larga, el rebote terminó quedando en la cabeza de Sandoval que no pudo mandarla dentro del arco.
Hubo tiempo para una más antes del pitazo final, centro de Sánchez cabeza de Faccioli que logró ganar en la altura y la pelota se fue apenas desviada.
Un primer tiempo sin fisuras y dominio total que no pudo ser volcado en el resultado para lograr estirar la ventaja.
En el segundo tiempo Chicago cambió su actitud pero no tenía ideas, se repetían los centros.
Al esperar un poco Defensores fue perdiendo terreno en el campo de juego y dejando venir a su rival.
La primera chance clara que tuvo Nueva Chicago en todo el partido fue un cabezazo por arriba del arquero que hizo lucir a Mariano Monllor sacando la pelota al córner, de ese mismo córner un anticipo en el área logró la igualdad.
Lo que quedó del partido encontró a un visitante con más vocación de ganarlo pero sin recursos.
Hay que hacer la salvedad de lo superior que pudo ser el Dragón durante el primer tiempo y la falta de contundencia para ponerle cifras justas al marcador.
Lamentablemente esta vez no se pudo conseguir el triunfo que hubiera significado el cuarto de manera consecutiva y nos hubiera dejado más arriba en la tabla de posiciones.
De todos modos partido a partido el equipo va encontrando su pertenencia en el juego y no se achica en ningún campo, en ninguna cancha, ahora toca viajar a Mendoza para enfrentar a Deportivo Maipú, para ir a buscar los tres porotos que le garanticen continuar en la mesa grande de apuestas.
Por: Martín El Lakkis
Fotos: Andrés Renaudier / Fausto Gómez