Defensores le ganó por 1 a 0 a Güemes de Santiago del Estero, en el minuto 88 y con gol de Nahuel Piethe, valor surgido de la cantera rojinegra, cuando la marea nos quería tapar, puso la cara el juvenil para estampar su primer gol en primera división, ante su gente y ante la historia, frente al primero de la zona B de la Primera Nacional, de la mano del Rusito el Dragón sacó boleto a la próxima estación: esperanza.
A diferencia de los últimos partidos en donde Defe se había repetido mucho en centros y pelotazos, renunciando de alguna forma a la que venía siendo su filosofía, de tratar de hilvanar jugadas triangulando, en esta tarde-noche de ensueño todo empezó distinto y así transcurrió.
El primer tiempo no dejó grandes chances, pero maceró y repuntó el autoestima de un equipo que necesitaba el triunfo como oxígeno en el espacio exterior. Algo había cambiado en el semblante de los muchachos nuestros.
Luego de cuatro partidos sin poder llevarse los tres porotos y para peor dejando poco en el superávit futbolístico, el momento para levantar era éste, contra el puntero, era uno de los más bajos momentos en el fútbol de este plantel, de noche y frente a su gente.
El regreso a la titularidad de Maravilla Olivares trajo aparejado el nacimiento desde el pie de la forma de jugar de este equipo, sin conseguir grandes oportunidades de gol pero ganando confianza y yendo por el camino que nos hace sentir orgullosos, el jugar al fútbol estando al frente siempre. tomando el protagonismo.
Pietrobono tampoco sufrió grandes sobresaltos, Güemes salteaba la mitad de cancha, sus avances eran de contra y en velocidad. Por momentos el equipo de Santiago del Estero dejaba pasar el tiempo y no ofrecía nada osado, atrevido, distinto en el partido.
Por el contrario los dirigidos por De La Riva, con paciencia buscaban llegar al arco tocando. Partidazo de Juan Manuel Sosa, buen partido de Nadal y gran segundo tiempo de Elías Borrego. El primer tiempo Francisco Ilarregui fue una pesadilla para sus marcadores, tirando caños y chiches siempre para desbordar y en favor del bien colectivo.
Con el ingreso de Piethe y el Animal López Defensores iba en busca de todo y lo consiguió justamente tras un quite de Borrego que tiró el centro, Luis López bajó la pelota y buscó al Ruso en el corazón del gol.
Quién escribe esta crónica sugirió en el mismo instante en que Almagro metió el gol frente a la tribuna en la que estaba la semana pasada, que a veces es mejor perder que empatar, por más que suene antipático, para que algo cambie, para que nada siga como estaba, para tocar fondo y salir a flote. Para ir de la nada a la gloria.
Y así fue que en una noche que será difícil de olvidar, para Nahuel Piethe imposible, se volvió al triunfo con gol de un juvenil producto de la cantera rojinegra, continuamos con la mirada en el reducido que otorga una plaza para disputar la Superliga.
Un sueño de toda la vida que se siente cada día más cerca. Queda mucho por mejorar pero es la mejor forma de ir a Morón la semana que viene, con el pecho inflado.
Anoche fueron avistados varios dragones sobrevolando las orillas del Río de la Plata.
El público tuvo su regreso al Pasquale nocturno, con toda la épica que eso agrega, la Markitos Zuker jugó su partido y los de adentro lo notaron y se contagiaron. Este cotejo lo ganamos todos unidos.
Te prometo Defensores, nunca te voy a dejar.
Por: Martín El Lakkis (@lapasionrojayne)
Fotos: Andrés Renaudier (@andresrenaudier)