En un partido vibrante, Güemes tomó dos goles de ventaja en sus ratitos de fútbol, pero Defensores despertó a tiempo, encontró el descuento en los pies de Olivares y lo empató sobre la hora tras un anticipo bárbaro de Lautaro Mur, con más corazón que fútbol rescató un punto ante un rival muy duro para seguir sentado en la mesa de los que discuten cosas grandes.
De movida el local demostró un poco más de protagonismo e inquietaba con los desbordes del número 7, su figura Daniel Baik, y manejaba los hilos Federico Boasso, de ellos dos vinieron los goles.
Con un centro de rastrón y otro por el aire con Daniel Baik como protagonista el Gaucho se puso 2 a 0. Defe no lograba terminar de hacer pie, le manejaban el partido, demorando, mostraba rebeldía Alejandro Martínez, el win ancho de espadas que tienen los de Esmerado.
El Rojinegro ajustó desde el banco de suplentes durante el entretiempo, el ingreso de Alejandro Lugones le dio dinámica al ataque, el Animal López se hacía muy importante bajando y aguantando todas las pelotas.
Mientas tanto Pietrobono sacaba un mano a mano tremendo y descolgaba los centros que llegaban como un mono. El Dragón jugaba con el corazón en el mano, completamente volcado en ataque y quedaba expuesto a las contras que podían propinarles los santiagueños.
Por la banda izquierda el ingreso de Lautaro Mur pareció ser la chispa que terminó de despabilar a los demás. En todo momento algo quedó claro dentro de la cancha, nadie estaba solo en ese rectángulo, un bloque de esperanza y fe defendía la armadura roja y negra como manada.
El partido empezaba a transitar el epílogo, la enjundia traía aparejada tras de sí juego en equipo, un centro de Lautaro Mur al corazón del área bajado con maestría por el Animal López, imantó en un pie de Olivares, que definió a un costado como en el patio de la casa.
Todos los dragones y dragonas desde sus casas o en cualquier punto del país creían en el gol milagroso que empate el duelo.
Tiro libre al área y Mur hacía lucir al arquero tras un tacazo. De ese córner ejecutado por Maravilla llegó el anticipo bárbaro de Lautaro, la joya de la abuela, mando la pelota al ángulo decretando la igualdad.
Todo el Bajo Núñez fue un puño apretado gritando por Defensores, un partido memorable que nos deja la enseñanza que cuando llega el invierno y sopla el viento blanco el Dragón solitario muere pero la manada sobrevive.
Siempre la idea es ganar en cualquier cancha, pero por como se fue dando el cotejo este punto sirve para mantenerse arriba del tren de la ilusión, de los sueños, para que sepan los nacidos y los que están por nacer que nacimos para vencer y no para ser vencidos.
¿Suerte? Eso es para los tontos.
Por: Martín El Lakkis (@lapasionrojayne)
Fotos: Prensa Club Atlético Güemes (SdE)
🗣️ Antes de subir al avión de regreso a Buenos Aires, Lautaro Mur manifestó su alegría por la oportunidad que aprovechó, destacó la remontada del segundo tiempo, y hasta dejó un concepto interesante sobre la identidad del club.#SomosDefe 🔴⚫ pic.twitter.com/qxM3ksixUQ
— Defensores de Belgrano (@defeweb) June 24, 2021
📹🗣️ Cerramos la jornada con los goles de Juan Manuel Olivares y Lautaro Mur, que le permitieron al Dragón traerse un punto de su visita a Santiago.#SomosDefe 🔴⚫ pic.twitter.com/50sN95qvse
— Defensores de Belgrano (@defeweb) June 24, 2021