Ni el tiro del final

 En un final no apto para cardíacos el Dragón empató 2 a 2 con Fénix, 2 goles había convertido Francisco Vazzoler, lo expulsaron injustamente faltando 20, se lo empataron en el minuto 48 y medio y en el minuto 50 tuvo un penal para llevarse los 3 puntos, pero Miranda, que había sido la figura del partido, lo estrelló en el palo.

Extrañamente a lo que ocurre la mayoría de las veces, sobre todo de local, fue el Cuervo quien tuvo el protagonismo en los primeros minutos del encuentro, cómodo con el traslado de la pelota y con el número 10 destacándose. Defe no la pasaba bien pero una linda combinación de pases derivaría en un gran gol del 9. Por la franja derecha y en los pies del Negro Enrique se gestó, Miranda le devolvió la pared, el 8 la guapeó y arrojó el centro al punto del penal, ahí apareció el goleador para fusilar al arquero con un cabezazo soberbio.

A partir de ahí fue el Dragón quien tuvo la manija del partido, y varias chances de gol con algunos lujos. La mejor fue una gran jugada en la que el Popi Quiroga combinó con Jaque, y al recibir la devolución filtro hermoso el pase para el 4. Frente al arquero Jaque no fue egoísta y cedió para Vazzoler.

En la línea salvó milagrosamente un hombre de Fénix. Bajo el reinado de Enrique el local era ahora quien manejaba los hilos, un tiro de él y uno de Quiroga de afuera del área pudieron haber aumentado la ventaja. Fénix tuvo sus chances en los pies de Romero.

El segundo tiempo volvió a poner al Cuervo como protagonista, y de esa manera en un tiro libre raro llegó al empate. El ingreso del Topo

Aguirre traería más jugadas de peligro. En un gran contraataque Marcos Giménez robó la pelota en la mitad de la cancha y tocó para el Pájaro, éste habilitó a Aguirre que desbordó a su marcador, tiró el centro y con la suela la bajó Vazzoler. Control y disparo certero a la ratonera.

Con la ventaja el Dragón quedó replegado, pero seguía atacando de contra. A los 25 minutos Biasutto expulsó de manera inexplicable a Vazzoler y a los 45 no quiso echar a Romero que aparte de una falta durísima contra el Loro, en la que vio la amarilla, peleó y generó circo con Anconetani. A los 48 llegó el empate en otra jugada rara, el partido se le había ido de las manos al árbitro y todo era descontrol, en el minuto 50 Pablo Miranda fue derribado en el área, pitaron penal y tomó la pelota. Última jugada, corazones paralizados, el arquero a una punta, el disparo sutil del 7 a la otra, y la caprichosa se estrelló contra el palo izquierdo del 1 de Fénix.

Con el penal malogrado se fue el partido dejando una sensación amarga, de todos modos hay revancha el sábado a las 17hs vs UAI Urquiza en Villa Lynch.

Por: Martín «Timpa» El Lakkis (@lapasionrojayne)

Fotos: Andrés Renaudier (@andresrenaudier) / Fausto Gómez (Instagram @repasfotografo)

Entrevistas: Nelson Colares (@nelsoncolares)

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