La más maravillosa música

Con un gol descomunal de Juan Manuel Olivares -que clavó un zapatazo desde 35 metros por arriba del arquero- Defensores consiguió una victoria épica en tierras tandilenses, la cuenta la había abierto la Joya Aguirre al minuto cuarenta de partido, transitoriamente empató para Santamarina Piñero, el Dragón jugó 60 minutos con un jugador menos y Maxi Velazco atajó un penal faltando 10.

De movida el encuentro empezó de forma poco normal, el número 9 y figura del conjunto local se lesionaba instantes antes del comienzo del partido.

Antes de los dos minutos Benegas peinó una pelota para el Topo que encaró con soltura al área y convirtió sin miramientos el primer gol de una noche que tendría todos los condimentos.

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Pero Santamarina no se quedaría esperando de brazos cruzados, buen manejo de pelota y distintos recursos para llegar a la valla rojinegra, todo pasaba por los pies de Mariano Gonzales, pero Acevedo era quien más inquietaba, desbordaba a pleno por todos lados.

Defe bien parado contenía los ataques e intentaba aumentar la ventaja hilvanando ataques y golpeando de contra.

A los 14 y tras una linda jugada grupal llegó el centro atrás de Caballero y el remate del 7 fue salvado milagrosamente en la línea por el 1 local. La otra clarita fue un remate de Juan Manuel Olivares que se fue apenas arriba del travesaño ¿un presagio?

Pero a los 36 del primer tiempo llegaría un momento bisagra del partido, expulsan a Sosa por un supuesto codazo y el local empezó a venirse con todo.

Bombazo de afuera del área y la descuelga Maxi Velazco, pero tras el córner llegó el gol del empate y el final de la primera etapa.

En el segundo tiempo lejos de amedrentarse Nardozza metió a Ferreyra a la cancha y dejó a Benegas y Aguirre arriba, para ir a buscarlo y no sufrir tanto en defensa.

Se hizo inmenso el Chelo Lamas y Olivares conducía, pero la bandera enarbolada era la de la solidaridad, todos corrían, todos metían, todos ocupaban el lugar del otro.

A los 12 tras una jugada en equipo el uno le tapó lo que era el segundo a Cristian Benegas de muy buenos últimos partidos.

Y así fue que llegó el premio para el héroe colectivo -el único colectivo según Oesterheld- Caballero en una pelota detenida amaga una vez y le da el pase al número 8, Maravilla recibió y sacó un milanesaso hermoso, la pelota serpentiaba en el aire como si tuviera un velociraptor adentro.

Se coló por arriba del buen arquero local para el delirio de todo el barrio que expectante seguía las acciones del ejército desarmado del Bajo Nuñez.

Pero todavía quedaría más para el suspenso y la adrenalina, penal para Santamarina, ejecución a un costado, gigante se hizo Maxi Velazco para desviar el remate -que obstinado pegó en el palo y recorrió la línea de meta- siendo despejado por algún héroe que en el tumulto parecía anónimo o colectivo.

Para el final quedaría demostrado el espíritu de grupo que reina en el plantel, conjunción de dirigencia, hinchas, cuerpo técnico y jugadores trayendo los 3 puntos a la ciudad de Buenos Aires.

Dragones que braman por los cielos del país, tomados de las manos, sabiendo que esto lo llevamos a buen puerto entre todos o no se salva nadie.

Empezando la semana en puestos de reducido para ascenso a la Superliga y la más maravillosa música sonando en los oídos “lo único que quiero ver a Defe campeón ver a Defe en primera”

Por: Martín El Lakkis (@lapasionrojayne)

Fotos: Andrés Renaudier (@andresrenaudier)

Entrevistas: Nelson Colares (@nelsoncolares)